Viernes 10-05-24

10-05-2024, Viernes de la VI semana de Pascua B, san Juan de Ávila
Meditar el Evangelio con tres puntos

Jn 16, 20-23a. «Nadie os quitará vuestra alegría». Los testigos de la misericordia divina como san Juan de Ávila son, por su santidad y bondad, lo mejor de la vida por su profunda identificación con el Corazón de Jesús.

  1. Uno de los frutos del Espíritu Santo es la alegría que nadie nos podrá quitar. Nuestra alegría es Cristo vivo en nosotros. Cuando llega el dolor, las lágrimas vividas con Jesús se revisten de paz. Es como atravesar una ladera oscura, pero sabiendo que en medio de la noche al fondo hay una luz que no se apaga, y nos alienta en la esperanza de que la última palabra la tiene el amor de Jesús que ilumina con su Espíritu las oscuridades de nuestra vida.
  2. En este texto encontramos que, en nuestro sufrimiento, tenemos que entendero como en los dolores de parto, que nos hacen dar a luz una vida nueva. No es un dolor de muerte, sino de vida. El sufrimiento de cruz que nos habla Cristo es un dolor de parto para nacer a una vida nueva.
  3. Es una promesa consoladora: «Nada ni nadie nos podrá quitar el amor de Dios», por tanto, es la fuente de nuestra alegría. Es siempre una alegría que permanece más allá de nuestras cruces, que vividas con Cristo no tienen comparación.
  • Francisco Cerro Chaves
    Arzobispo de Toledo
    Primado de España.